Soldados israelíes abordaron este sábado el barco Handala, una embarcación fletada por el movimiento internacional Flotilla de la Libertad con destino a Gaza, cargada de ayuda humanitaria. La operación fue transmitida en directo por los propios activistas hasta que la señal fue abruptamente cortada minutos después del abordaje.
El Handala, que había zarpado desde Siracusa, en Sicilia, transportaba alimentos, leche infantil, medicamentos y materiales médicos destinados a la población palestina de Gaza, según informaron los organizadores de la misión. A bordo viajaban 21 personas, entre ellas parlamentarios, personal médico y voluntarios civiles, todos desarmados.
La organización Flotilla de la Libertad, conocida por sus esfuerzos en romper el bloqueo marítimo impuesto por Israel sobre Gaza, denunció la operación como un acto de piratería en aguas internacionales.
El Ministerio de Relaciones Exteriores israelí confirmó la intervención naval, afirmando que “la marina israelí impidió al barco entrar ilegalmente a la zona costera de Gaza” y que la embarcación “avanza hacia la costa de Israel. Todos los pasajeros están a salvo”, añadió.
Poco antes del abordaje, la tripulación del Handala había emitido una llamada de socorro al detectar la aproximación de las fuerzas israelíes. En las imágenes difundidas por la transmisión en directo, los activistas aparecían sentados en la cubierta con las manos en alto, mientras los soldados tomaban el control del buque.
Según medios israelíes, el barco será remolcado al puerto de Ashdod y los activistas serán deportados. Hasta el momento, se desconoce la situación exacta de la tripulación y los pasajeros, ya que la comunicación fue interrumpida durante el asalto.
Una Gaza devastada por el asedio y el genocidio
La misión del Handala cobra especial relevancia ante la situación catastrófica que vive Gaza. Desde el 2 de marzo, el enclave bloqueado sufre una hambruna generalizada provocada por el cierre total de los cruces fronterizos y la prohibición israelí de entrada de alimentos y medicinas. La desnutrición severa afecta especialmente a niños y pacientes vulnerables, en medio de un sistema sanitario colapsado.
Las cifras de la devastación son abrumadoras. Israel ha matado a casi 60.000 palestinos, en su mayoría mujeres y niños, y se teme que otros 11.000 estén sepultados bajo los escombros, según la agencia oficial palestina WAFA. Expertos locales e internacionales estiman que el número real de víctimas podría superar los 200.000.
A lo largo de estos meses, el ejército israelí ha destruido gran parte de la infraestructura civil de Gaza, reduciendo a ruinas barrios enteros y desplazando prácticamente a toda su población. La ONU y múltiples organizaciones de derechos humanos han calificado la situación como una catástrofe humanitaria sin precedentes.