En el segundo año de la devastadora ofensiva de Israel contra Gaza, las mujeres en todo el enclave enfrentan dificultades inimaginables.
Con hogares destruidos, familias desintegradas y una vida diaria reducida a la mera supervivencia, las madres se han convertido en la última línea de defensa de sus hijos, y un reflejo de la esperanza.
Desde que Israel lanzó su genocidio contra Gaza el 7 de octubre de 2023, las mujeres han soportado desplazamientos forzados, hambre, sed y condiciones extremas en refugios improvisados. Pero para muchas de ellas, la pérdida más dolorosa ha sido la de sus esposos y familias, quedando solas para criar a sus hijos bajo constantes bombardeos.
Desde que comenzó el genocidio, Ula Husso, periodista, relató a la agencia turca Anadolu que ella y su familia han sido desplazadas varias veces. En los ataques israelíes perdió a sus dos hermanos. En medio del desplazamiento forzado, ni siquiera pudo despedir el cuerpo de su hermano mayor.
Meses después, tras la retirada de las fuerzas israelíes del hospital Al Shifa en la ciudad de Gaza, regresó con la esperanza de encontrarlo.
“Gracias a Dios, encontré su cuerpo intacto”, recordó. “Lo reconocí entre los cadáveres. Fueron momentos muy difíciles. Lo saqué de allí y lo trasladé a otro lugar”.
“Las madres de Gaza valen por cien hombres”
La pérdida de sus hermanos hundió a Husso en una depresión profunda y debió poner en pausa su carrera.
“En ese tiempo, mi esposo me apoyó enormemente”, explicó. “Gracias a él volví a tomar la cámara y empecé a documentar crímenes y encabezar actividades para niños. Poco a poco, recuperé la confianza y volví a ejercer como periodista”.
Pero esa recuperación se detuvo: en un ataque israelí, su esposo también fue asesinado.
“Ese fue el momento en que entendí que debía ser fuerte porque ya no tenía a nadie en quien apoyarme”, relató. “Después de perder a mi esposo y a mis hermanos, me di cuenta de que solo me tenía a mí misma”.
“Las mujeres de Gaza tienen que ser fuertes por sus hijos. Yo tengo un hijo; no puedo dejarlo al cuidado de otra persona”, agregó. “Gracias a Dios superé todos los desafíos y seguí trabajando. Pero mientras estoy en el trabajo, no dejo de pensar en él, siempre me pregunto si algo le habrá pasado”.
Husso describió a las madres palestinas de Gaza como “las más fuertes del mundo”, capaces de soportar condiciones que pocas podrían resistir.
“Nos convertimos en madres y padres”, afirmó. “Muchas mujeres quedaron viudas, pero por sus hijos y por las responsabilidades que asumieron, tuvieron que levantarse. Tuvieron que ser fuertes por ellas y por sus hijos. Tuvieron que convertirse en su propio sostén. Las madres de Gaza valen por cien hombres”.
“Es muy difícil para las madres”
Wafa Abu Aita, quien también quedó viuda al inicio del asedio israelí, ahora cría a sus cinco hijos sola. El desplazamiento constante y la falta de alimentos han cobrado factura, con precios que no dejan de aumentar.
“Es muy difícil para las madres que perdieron a sus esposos. Lo más duro para mí durante estos ataques fue perder a mi esposo”, recordó. “Tener que asumir tantas responsabilidades sin un ingreso es un gran desafío”.
Para seguir adelante, Abu Aita se aferra a su fe y a su rol de madre.
“Los hijos son una responsabilidad que Dios entrega a los padres”, explicó, decidida a cumplir con su deber de criarlos bien, a pesar de la devastación.
Desde que Israel lanzó su ofensiva en Gaza, más de 52.800 palestinos, la mayoría mujeres y niños, han sido asesinados, según el Ministerio de Salud del enclave.
La Corte Penal Internacional emitió en noviembre pasado órdenes de arresto contra el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y su exministro de Defensa, Yoav Gallant, por crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad.
Israel también enfrenta un proceso por genocidio ante la Corte Internacional de Justicia por su ofensiva contra Gaza.

En Gaza denuncian que Israel busca crear “campos de aislamiento forzados” para palestinos al “estilo nazi”, a través de la distribución de ayuda humanitaria, mientras la ONU advierte sobre la situación de hambruna total.