En “alerta” se declararon las Fuerzas Armadas de Venezuela por un supuesto plan de “falsa bandera” que, según el Gobierno de Nicolás Maduro, busca atacar una plataforma de la petrolera estadounidense ExxonMobil en aguas del Esequibo, un territorio rico en petróleo que Caracas disputa con Guyana. El Ministerio de Defensa del país denunció este domingo que el objetivo sería culpar a Venezuela y justificar así una posible agresión internacional, en medio de la larga puja con el país vecino que ha estado plagada de acusaciones cruzadas.
En un comunicado, el ministro Vladimir Padrino López se refirió a una “nueva trama del imperialismo norteamericano" para "atacar la plataforma de ExxonMobil" que opera en aguas que calificó de "pendientes por delimitar", con el finde "generar confusión e iniciar una escalada de agresión" contra Venezuela.
La Fuerza Armada venezolana expresó este domingo su "férrea voluntad" de "responder con acciones contundentes" a "cualquier amenaza que atente contra la integridad y la paz" de su país.
La alerta en el Ejército y las declaraciones de Padrino López se dan después de que el sábado, la vicepresidenta Delcy Rodríguez denunciara inicialmente el supuesto plan encubierto en el que vinculó a la petrolera ExxonMobil, al secretario de Estado de EE.UU., Marco Rubio, a la dirigente opositora María Corina Machado, y a Erik Prince, fundador de la empresa de seguridad privada Blackwater (ahora Academi).
Según Rodríguez, estas personas "tienen pensado y planificado atacar esta plataforma de la ExxonMobil para justificar algún tipo de represalia y de acción contra Venezuela", aseguró Rodríguez, aunque no presentó pruebas al respecto.
Este episodio forma parte de una reciente escalada en las tensiones entre Venezuela y Guyana por el Esequibo, que se disputan desde hace más de un siglo. En medio del pulso, el secretario Rubio hizo una visita a Georgetown, capital de Guyana, y advirtió que cualquier ataque de Venezuela a ese país o a ExxonMobil sería “un gran error” con serias consecuencias.
Rubio advirtió entonces que Estados Unidos tiene "una Armada grande y puede llegar a casi cualquier lugar, a cualquier parte del mundo". Pero señaló en ese momento que no iba a entrar en detalles sobre lo que haría el Gobierno de Donald Trump en caso de un ataque de Venezuela a Guyana.
Y, semanas antes de la visita de Rubio, Maduro les advirtió a principios de marzo a Guyana y a la petrolera estadounidense ExxonMobil que “tomará medidas” para detener lo que calificó como una "acción ilegal" de Georgetown en una zona marítima que, afirmó, aún está "pendiente de delimitación internacional".
Las declaraciones de Maduro eran una respuesta a la denuncia del presidente guyanés, Irfaan Ali, días antes sobre el ingreso de un buque de la Armada venezolana "en aguas de Guyana". El mandatario venezolano sostuvo en ese entonces que Guyana está en una "tarea ilegal de disponer de un mar territorial pendiente de delimitación internacional para actividades de explotación petrolera".
¿De dónde viene el conflicto?
La disputa territorial por el Esequibo data del siglo XIX, cuando el Reino Unido y Venezuela se enfrentaron tras el descubrimiento de oro en la región.
Guyana defiende un Laudo Arbitral de París de 1899, que otorgó la soberanía del Esequibo a la entonces Guyana Británica, aún siendo colonia.
Décadas después, en 1962, cuando el Reino Unido estaba haciendo preparativos finales para la independencia de la Guayana Británica, Venezuela aseguró que el laudo de 1899 fue “arbitrario” y, por lo tanto, era “nulo”.
Cuatro años después y antes de la independencia guyanesa, en 1966, Venezuela y Reino Unido firmaron el Acuerdo de Ginebra, que estableció las bases para una solución negociada a la controversia territorial. En concreto, determinó crear una comisión para resolver la histórica controversia, pero al día de hoy no se ha materializado.
Pero Guyana rechaza este acuerdo. En 2018, solicitó a la Corte Internacional de Justicia para que ratificara el laudo de 1899 que fijó sus actuales fronteras. A raíz de ese acuerdo, Guyana hoy sostiene que las actividades petroleras se desarrollan legalmente dentro de su zona económica exclusiva.
Advertencias internacionales
Organismos regionales como la Comunidad del Caribe han pedido a ambas partes evitar acciones confrontativas. En un comunicado reciente, instaron a Venezuela a retirar sus buques y abstenerse de interferir con las plataformas flotantes de producción operadas por ExxonMobil.
Las acusaciones de Caracas, a raíz del supuesto plan de “falsa bandera” orquestado desde EE.UU., coinciden con la decisión del presidente Trump de revocar las licencias para la exportación de petróleo venezolano, emitidas por el anterior gobierno de Joe Biden. La medida, que afecta directamente a Chevron, principal operadora estadounidense en Venezuela, fue rechazada enérgicamente por el gobierno de Maduro.