"Estamos destruyendo los cuerpos y las mentes de los niños de Gaza. Estamos matando de hambre a los niños de Gaza. Somos cómplices." Así lo afirmó Michael Ryan, subdirector general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), al describir la desgarradora situación que vive el enclave palestino. A su vez, la crisis humanitaria continúa empeorando mientras la comunidad internacional, liderada por las Naciones Unidas, insta a Israel a levantar el cerco y permitir el ingreso de ayuda vital, para evitar una catástrofe de proporciones apocalípticas.
En esta línea el director del organismo urgió a la acción inmediata de la comunidad global: “Como médico, estoy indignado. Esto es una abominación”.
Paralelamente, las Naciones Unidas renovaron su exigencia a Israel de permitir el ingreso de asistencia humanitaria, describiendo el bloqueo como un "castigo colectivo" impuesto a una población ya devastada por el conflicto.
"El derecho internacional es claro: como potencia ocupante, Israel debe permitir el ingreso de ayuda humanitaria. La asistencia, y las vidas civiles que salva, nunca deben ser moneda de cambio," expresó Tom Fletcher, jefe de ayuda humanitaria de la ONU, en un comunicado emitido este jueves.
Desde el 2 de marzo, Israel mantiene cerrados todos los cruces hacia Gaza, bloqueando el ingreso de suministros esenciales como alimentos, medicinas y combustible. Esta medida persiste a pesar de los informes que alertan sobre niveles críticos de hambruna en diversas zonas del enclave palestino.
Fletcher subrayó que el bloqueo de la ayuda "condena a los civiles al hambre, los priva de apoyo médico básico, los despoja de dignidad y esperanza", agregando: "Bloquear la ayuda mata." Además, recordó que el movimiento humanitario opera bajo principios de independencia, imparcialidad y neutralidad, y que todos los civiles, sin excepción, tienen derecho a ser protegidos.
El funcionario de la ONU alertó que las condiciones impuestas por Israel "ni siquiera cumplen con los estándares mínimos para una asistencia humanitaria basada en principios." Las restricciones más recientes, propuestas por Tel Aviv, impiden que las agencias internacionales actúen con eficacia sobre el terreno.
Fletcher instó a Israel a "levantar este brutal bloqueo" y permitir que los trabajadores humanitarios cumplan con su misión. “Para los civiles que siguen desprotegidos, ninguna disculpa será suficiente. Lamento sinceramente que no hayamos logrado movilizar a la comunidad internacional para evitar esta injusticia,” concluyó.
Continúan las masacres con nuevos ataques
Al menos doce palestinos fueron asesinados este sábado en nuevos ataques israelíes dirigidos contra múltiples zonas del sur y norte de Gaza, según informaron fuentes locales y médicas.
Entre las víctimas se encuentra un niño de 10 años, Rashid Mohammad Rashid Al-Nayyar, alcanzado por un dron israelí en el área de Qizan Al-Nayyar, al sureste de Jan Yunis. En la misma zona falleció también Mohammad Suleiman Al-Nayyar, un joven que había resultado gravemente herido días atrás en un bombardeo que ya había causado la muerte de su madre y hermano.
En otro ataque, un civil fue asesinado en la calle Al-Tina, también en Jan Yunis. En Rafah, las autoridades médicas confirmaron la muerte de Mohammad Ahmad Abu Ghali, herido previamente durante un bombardeo en la zona de Al-Mawasi.
En el norte de Gaza, al menos siete civiles murieron tras el impacto de un dron israelí contra una tienda de duelo en Beit Lahia, cerca del área de Al-Nadi. Mientras tanto, en Deir Al-Balah, un niño de cinco años, falleció a causa de heridas sufridas en un ataque aéreo el día anterior.
La ofensiva israelí en Gaza, iniciada en octubre de 2023, ha dejado hasta el momento al menos 52.418 palestinos muertos y más de 118.091 heridos, según cifras actualizadas. Miles de personas continúan atrapadas bajo los escombros, inaccesibles para los equipos de rescate debido a los constantes ataques.
Pese a los reiterados llamados del Consejo de Seguridad de la ONU a un alto el fuego inmediato y a las órdenes de la Corte Internacional de Justicia para prevenir el genocidio y aliviar la catástrofe humanitaria, los bombardeos israelíes no cesan.
Actualmente, Tel Aviv enfrenta un juicio por genocidio ante la Corte Internacional de Justicia debido a su ofensiva en Gaza. Asimismo, la Corte Penal Internacional emitió órdenes de arresto en noviembre contra el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y su exministro de Defensa Yoav Gallant, por crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad.