En un contexto de reconfiguración del comercio global, marcado por las tensiones entre China y Estados Unidos, América Latina redefine sus alianzas. Este martes, Beijing será el epicentro del IV Foro China-CELAC, donde los líderes de los países miembros de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) se reunirán para impulsar la cooperación política y económica con el país asiático.
El foro estará marcado por dos acontecimientos inusuales: uno, que el presidente de China, Xi Jinping, pronunciará un discurso en la cumbre —la primera vez que lo hace desde la edición inaugural, hace 10 años—. El segundo, la presencia de tres presidentes: el de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva; el de Colombia, Gustavo Petro; y el de Chile, Gabriel Boric.
En los últimos años, la relación entre China y América Latina se estrechó principalmente en el ámbito comercial. El intercambio bilateral entre Beijing y los países de la CELAC alcanzó los 427.000 millones de dólares entre enero y septiembre de 2024, según datos oficiales chinos.
En este contexto, el Foro China-CELAC ha servido como vehículo para profundizar el diálogo sobre comercio, inversión y cooperación en infraestructuras en el marco de la Iniciativa de la Franja y la Ruta. Más de 20 países de la CELAC se han adherido a este programa, valorado en un billón de dólares. Además, China ha desplazado a Estados Unidos como principal socio comercial de Brasil, Perú y Chile, entre otros.
Colombia, presidente rotatorio de la CELAC
Pese a que el foro China-CELAC es una reunión de ministros de Relaciones Exteriores, esta vez contará con la presencia inédita de tres jefes de Estado latinoamericanos. Así, el presidente de Colombia, Petro, se reunirá esta semana con su par chino, Xi Jinping, en una visita oficial que “busca fortalecer los lazos diplomáticos, económicos y de cooperación" con el gigante asiático.
"Con este encuentro, Colombia reafirma su compromiso con el multilateralismo, la integración regional y la construcción de alianzas estratégicas que impulsen el desarrollo sostenible y la equidad global", agrega la nota del Gobierno de Colombia, país que ostenta actualmente la presidencia rotatoria de la CELAC.
Durante su estancia en China, que se extenderá hasta el 17 de mayo, se firmarán varios acuerdos comerciales y se contempla un posible memorando de entendimiento para que Colombia se adhiera a la Iniciativa de la Franja y la Ruta.
"Quiero hablar con los chinos sobre el diálogo entre civilizaciones, sobre que América Latina debe volcarse al mundo y sobre Colombia, obviamente, para firmar varios tratados comerciales", anticipó el mandatario el pasado 21 de abril.
La posible incorporación de Colombia a las Nuevas Rutas de la Seda lleva implícito un mensaje a Estados Unidos. Mientras Washington intensifica su disputa comercial con Beijing mediante nuevos aranceles, también ha presionado a los países latinoamericanos para que se alejen de China y abandonen proyectos como este. Panamá, por ejemplo, ya se retiró de la iniciativa este año.
Socio comercial de Brasil
Coincidiendo con la cumbre, Beijing también acogerá este martes la visita de Estado del presidente brasileño Lula da Silva. Durante su estancia, se prevé la firma de más de una docena de acuerdos bilaterales.
China es, con diferencia, el principal mercado de exportación de Brasil, en un comercio dominado por materias primas como la soja, el mineral de hierro y el petróleo. En 2023, Beijing compró soja brasileña por un valor de 37.000 millones de dólares, lo que consolidó a Brasil como su principal proveedor, en un contexto donde el mayor comprador de soja del mundo busca diversificar sus fuentes y reducir su dependencia de Estados Unidos.
Líderes latinoamericanos
Incluso antes del inicio formal del foro, representantes de distintos gobiernos de la CELAC comenzaron a llegar a Beijing para reforzar los vínculos bilaterales.
El ministro de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi, recibió a su homólogo cubano, Bruno Rodríguez, quien calificó de “especiales y estratégicos” los lazos con Beijing. Durante la reunión, Rodríguez aseguró que "propiciar los mejores vínculos" entre China y América Latina es un "deber" para Cuba, en un "orden internacional excluyente y disfuncional".
También se reunió con Wang el canciller peruano, Elmer Schialer, quien destacó los “grandes y buenos frutos” que han dado las relaciones entre Lima y Beijing. Recalcó la importancia que da su país a la “cooperación” birregional entre el gigante asiático y América Latina y el Caribe, y agregó que estos lazos se basan en "la igualdad, el beneficio mutuo, la paz y el desarrollo compartido".
Wang Yi sostuvo además encuentros bilaterales con los cancilleres de Venezuela, Yván Gil, y de Uruguay, Mario Lubetkin.
"No servir de patio trasero"
Por otra parte, un alto funcionario del ministerio dijo el domingo que Beijing "siempre ha abordado el desarrollo de las relaciones entre China y América Latina desde una perspectiva estratégica y a largo plazo".
"China considera que los países de América Latina y el Caribe son actores importantes en los procesos de multipolaridad mundial y globalización económica", indicó el viceministro de Relaciones Exteriores, Miao Deyu, en una conferencia de prensa.
"Los pueblos de América Latina y el Caribe buscan construir su propia patria, no servir de patio trasero de ningún otro país", añadió, en una referencia posible a Estados Unidos.
China está "dispuesta a fortalecer la comunicación y la coordinación con los países latinoamericanos" ante los aranceles estadounidenses y a "trabajar conjuntamente para (...) oponerse al unilateralismo y la intimidación económica", añadió Miao.
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