Las autoridades de la Ciudad de Gaza alertaron este viernes sobre el colapso total de los sistemas de agua y saneamiento debido a la falta de combustible y los ataques israelíes contra infraestructura clave.
Hosni Mehanna, portavoz del municipio, dijo a la agencia Anadolu que la ciudad se acerca a una etapa de “sed masiva” y a una catástrofe sanitaria y ambiental que afectaría a cientos de miles de personas. “Hacemos un llamado urgente a todas las organizaciones internacionales y humanitarias para que actúen de inmediato, detengan la ofensiva israelí, abran los pasos fronterizos y permitan la entrada de combustible y equipos”, declaró.
Mehanna explicó que cientos de familias se han visto obligadas a trasladarse a las zonas costeras de Gaza, donde no hay servicios básicos, especialmente agua potable.
Advirtió que la falta de agua agravará aún más el sufrimiento de la población, en un contexto de hambruna creciente y condiciones de vida extremadamente precarias. “La demanda de agua ha aumentado con las personas desplazadas concentradas en áreas reducidas, mientras otras zonas no reciben suministro por la destrucción de la infraestructura. Esto nos sitúa al borde de un colapso completo del sistema de agua”, señaló.
Hospitales al límite
La ONU informó este viernes que al menos el 94% de los hospitales en Gaza han sido dañados o destruidos, y que la mitad ya no están operativos.
Farhan Haq, portavoz de Naciones Unidas, citó datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y explicó que “la intensificación de los ataques ha llevado al ya debilitado sistema sanitario de Gaza al borde del colapso”.
Indicó que cuatro hospitales principales suspendieron sus operaciones en la última semana, ya sea por ataques directos o por órdenes de evacuación.
“La OMS señala que el 4% de los casi 700 ataques contra instalaciones de salud en Gaza desde octubre de 2023 ocurrieron solo en la última semana”, dijo Haq. “En siete días se registraron 28 ataques, lo que equivale a cuatro veces el promedio diario”.
Ayuda humanitaria insuficiente
Sobre la entrega de ayuda —que Israel había prometido sería significativa pero hasta ahora no lo ha sido—, Haq informó que “ayer se trasladaron unos 100 camiones completos al cruce de Kareem Shalom, y se recogieron apenas 35 desde el lado palestino para acercarlos a la población que los necesita”.
Sin embargo, advirtió que al menos 15 camiones con alimentos destinados a panaderías fueron saqueados durante la noche. “El hambre, la privación y la incertidumbre sobre si llegará ayuda están aumentando la inseguridad”, expresó.
Haq pidió a las autoridades israelíes permitir “un volumen mucho mayor de asistencia, de forma más rápida, constante y segura”.
Guterres denuncia niveles “atroces” de muerte y destrucción
El secretario general de la ONU, António Guterres, denunció este viernes los “niveles atroces de muerte y destrucción” provocados por Israel en Gaza, y afirmó que la entrega de ayuda “equivale a una cucharadita de lo que se necesita”.
“Los palestinos en Gaza están viviendo lo que puede ser la fase más cruel de este conflicto”, dijo Guterres desde la sede de la ONU en Nueva York.
Criticó el bloqueo israelí, que durante casi 80 días impidió la entrada de ayuda humanitaria. “Por fin ha empezado a ingresar una cantidad mínima de suministros”, agregó.

Entre lágrimas, el jefe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) urgió a Israel a tener piedad ante el genocidio en Gaza. Aún así, los planes de ocupación de Tel Aviv siguen y ahora prepara una “fase intensificada” con tropas adicionales.
Detalló que, aunque se autorizó la entrada de casi 400 camiones por el cruce de Kerem Shalom, solo se ha podido recoger la carga de 115. “En todo caso, la ayuda permitida hasta ahora es una cucharadita, cuando se necesita un torrente de asistencia”, subrayó.
"Mientras tanto, la ofensiva militar israelí se está intensificando con niveles atroces de muerte y destrucción", añadió. También alertó sobre el nivel de desplazamiento: “El 80% de Gaza ha sido declarado zona militar o área de evacuación. Es decir, cuatro quintas partes del territorio se han vuelto inaccesibles para su propia población”.
595 días de genocidio
Cuando se cumplen 595 días desde el inicio de la ofensiva israelí en Gaza, la cifra de muertos documentados alcanza los 53.822, y al menos 11.000 personas siguen desaparecidas bajo los escombros.
Este sábado por la mañana, otros siete palestinos fueron asesinados en nuevos bombardeos israelíes en distintos puntos del enclave.
Según la agencia oficial Wafa, una familia entera —padre, madre y dos hijos— murió tras un ataque aéreo contra la casa de la familia Al-Madhoun, en el barrio de Al-Amal, en el oeste de Jan Yunis, al sur de Gaza.
Otro ataque sobre una vivienda de la familia Jouda, en el campo de refugiados de Nuseirat, dejó al menos dos muertos y varios heridos.
En esa misma localidad, un hombre falleció y cinco personas resultaron heridas, entre ellas un bebé de un mes, por el impacto de un misil sobre la casa de la familia Al-Majdalawi.
El viernes, la Defensa Civil de Gaza informó que más de 50 personas murieron o están desaparecidas tras un bombardeo nocturno que destruyó por completo una vivienda en la zona de Yabalia al-Balad, en el norte.

Casi 80 años después de la limpieza étnica de Palestina, el actual ataque de Israel a Gaza y la Cisjordania ocupada marca una nueva fase sin precedentes de violencia masiva, destrucción y anexión ilegal.